DIRECTO, disturbios anti-ICE | La alcaldesa de Los Ángeles decreta toque de queda

Ante la escalada de violencia y saqueos, la alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, anunció un toque de queda nocturno a partir de las 8 p. m. en el centro de la ciudad. La medida busca frenar el vandalismo y contener a quienes, según ella, se están aprovechando del caos. A través de redes sociales, Bass pidió a los ciudadanos que no viven ni trabajan en la zona que la eviten por completo.

El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) publicó en la red social X un video captado por dron que muestra a alborotadores atacando una camioneta durante las recientes protestas en Los Ángeles. En las imágenes también se ve a la policía avanzando entre fuegos artificiales que estallan en plena vía pública.
“La situación está lejos de ser pacífica”, advirtió el DHS en su mensaje, instando a los líderes de California a actuar con firmeza: “Los políticos de California deben calmar a su turba alborotadora”.

El Departamento de Seguridad Pública de Texas (DPS) informó que arrestó a cinco personas durante una protesta contra el ICE frente al Complejo del Capitolio en Austin, el lunes por la noche. Los detenidos enfrentan varios cargos, incluyendo resistencia al arresto, daño criminal grave, intoxicación pública y agresión.
Los arrestados fueron identificados como Alvin Jarret Talley (23), Hiram Gilberto García (27), Zakk Wylde Bonham (22), Luis Dávila (21) y William Haraway (50). En un comunicado, el DPS reafirmó su compromiso con la ley y el orden, advirtiendo que no tolerará acciones que pongan en riesgo a los agentes o alteren la seguridad pública.

Un juez federal negó la solicitud urgente del gobernador Gavin Newsom para bloquear el despliegue de tropas ordenado por la Administración Trump en Los Ángeles. El juez Charles Breyer concedió más tiempo al Gobierno federal para responder a la demanda de California, que alega un uso indebido de fuerzas federales y de la Guardia Nacional estatal para tareas de inmigración, pese a la oposición de Newsom. Una audiencia judicial sobre el caso está programada para el jueves.

Desde Fort Bragg, Carolina del Norte, el presidente Donald Trump se dirigió a soldados del Ejército y condenó enérgicamente las protestas violentas en Los Ángeles, vinculándolas con la inmigración descontrolada. “Lo que están presenciando en California es un ataque descarado a la paz, al orden público y a la soberanía nacional, perpetrado por alborotadores que portan banderas extranjeras con el objetivo de continuar una invasión extranjera de nuestro país. No vamos a permitir que eso suceda”, afirmó, señalando que muchos manifestantes portaban banderas extranjeras y quemaban la estadounidense.
Trump justificó el despliegue de tropas federales y de la Guardia Nacional para restablecer el orden, advirtiendo que sin esa intervención, “Los Ángeles no existiría hoy, estaría ardiendo”. 

La noche del lunes, el Departamento de Policía de Los Ángeles arrestó a 96 personas por negarse a dispersarse durante protestas en el centro de la ciudad. Según informó el LAPD, también se realizaron arrestos individuales por agresión con un arma mortal, resistencia al arresto y vandalismo. Dos agentes resultaron heridos y fueron hospitalizados, aunque ya fueron dados de alta. Además, se reportaron saqueos en varios negocios, lo que llevó a 14 detenciones más. Para controlar a la multitud, los oficiales emplearon municiones no letales. La situación fue contenida alrededor de las 3 a. m.

En medio de los disturbios provocados por las redadas migratorias implementadas por la administración Trump, la selección nacional de fútbol de México decidió cambiar de hotel durante su estancia en Los Ángeles. Un portavoz del equipo le informó a The Associated Press que originalmente tenían reservaciones en el centro de la ciudad, pero, con autorización de la CONCACAF, se trasladaron a una ubicación distinta por motivos de seguridad. El equipo se encuentra en California para disputar un partido del torneo regional contra República Dominicana en el SoFi Stadium, en Inglewood.

Los medios de comunicación publicaron imágenes de una persona repartiendo descaradamente equipo táctico a los agitadores enmascarados en Los Ángeles mientras la violencia continúa aumentando. El hecho ocurre a pesar de que el gobernador de California, Gavin Newsom, y otros demócratas afirman repetidamente que las manifestaciones han sido pacíficas.

El presidente Donald Trump aseguró que si no hubiera mandado las tropas a Los Ángeles, las últimas tres noches, "esa hermosa y gran ciudad estaría ardiendo hasta los cimientos ahora mismo, al igual que 25.000 casas ardieron hasta los cimientos en Los Ángeles debido a la incompetencia del gobernador y el alcalde".

La Casa Blanca subió a sus redes un vídeo con imágenes de los disturbios en Los Ángeles junto a declaraciones de líderes demócratas como Gavin Newsom, Karen Bass o la representante Maxine Waters asegurando que se trata de manifestaciones "pacíficas" o asegurando que "todo está bajo control".

Una encuesta de YouGov indica que el 45% de los votantes no aprueba las manifestaciones que se están celebrando para protestar por las redadas del ICE. Según el sondeo, tan sólo el 36% las apoya, mientras que cerca del 20% no está seguro de su postura.
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Los demócratas son quienes más se solidarizan con los manifestantes, con un 58% aprobando las concentraciones. Por el contrario, el 73% de los republicanos se muestran en contra de ellas. Los independientes también las desaprueban mayoritariamente (41%).

Tom Homan acudió a los medios a explicar la situación de las redadas del ICE en Los Ángeles y apuntó que, en estos momentos, el gobernador Gavin Newsom no ha hecho nada por lo que pudiera ser detenido hasta el momento. 

El zar de las fronteras apuntó, además que la polémica sobre el posible arresto de Newsom o la alcaldesa angelina Karen Bass es fruto de la tergiversación sus palabras realizadas por Jacob Soboroff durante la entrevista en MSNBC.
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"Es una broma. Es un periodista deshonesto. Dije muchas veces: 'Puedes protestar; tienes tus derechos de la Primera Enmienda', pero cuando cruzas esa línea, pones tus manos sobre un oficial de ICE, o destruyes la propiedad o impides el cumplimiento de la ley, o estás albergando y ocultando a sabiendas a un extranjero ilegal, eso es un crimen. Y la administración Trump no lo va a tolerar".
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​"Entonces el periodista preguntó: '¿Podrían arrestar al gobernador Newsom o a la alcaldesa [Karen] Bass?'. Yo respondí: 'Bueno, nadie está por encima de la ley. Si cruzan la línea, cometen un delito, por supuesto que pueden. Así que no se habló de arrestar a Newsom'. Eso es lo que estaba pasando. Nunca amenacé con arrestar al gobernador Newsom".

Las protestas contra el ICE se expanden ya por ciudades de todo el país. En algunos casos, como Los Ángeles, San Francisco, Dallas, Austin o Nueva York, se han registrado enfrentamientos con las fuerzas del orden y detenciones. Sin embargo, también se ha producido movilizaciones en Atlanta, Seattle o Louisville, entre otras localidades.

El gobernador de Texas, Greg Abbott, advirtió de que Texas no permitirá que los disturbios alcancen el nivel visto en Los Ángeles y San Francisco, señalando que está dispuesto a desplegar a las tropas del Departamento de Seguridad Pública del Estado de la Estrella Solitaria, según señaló en un comunicado el secretario de prensa estatal, Andrew Mahaleris. 

El lunes por la noche varias manifestaciones se tornaron violentas, provocando choques con las fuerzas del orden en Texas. Aunque los agentes no han informado de si se han producido detenciones, declararon "asamblea ilegal" para advertir a los participantes en las protestas de que abandonaran las inmediaciones del puente Margaret Hunt Hill de Dallas. También se registraron incidentes en Austin y Houston, según medios locales. 

La fiscal general Pam Bondi confirmó que el FBI identificó al hombre que agredió a un agente federal durante las protestas en Paramount. El sospechoso, de apellido Reyes, habría lanzado piedras contra vehículos oficiales, hiriendo a un agente y dañando propiedad federal.

La fiscal confirmó que se ejecutó una orden de allanamiento en su domicilio y será incluido en la lista de los más buscados. Bondi advirtió que quienes agredan, escupan o ataquen a personal federal serán procesados con todo el peso de la ley.

Los manifestantes anti-ICE en Los Ángeles están recibiendo máscaras antigás, tapones para oídos y botellas de agua para lanzarlas contra agentes de la Policía, según informó el periodista de Fox News Bill Melugin.

Según el reportero, camiones con escudos biónicos, cuyo valor supera los 60 dólares por unidad, están siendo distribuidos en distintos puntos de la ciudad. Esta afirmación está alimentando la percepción de que las protestas no serían completamente espontáneas..

La magnitud de las protestas y la aparente organización logística de los miles de manifestantes ha generado fuertes cuestionamientos sobre el origen de las manifestaciones y si estas están siendo financiadas o no. De hecho, funcionarios federales ya evalúan posibles vínculos con grupos organizados y financiamiento externo.

La situación se da en el marco de un clima de alta tensión tras las redadas migratorias del viernes y el despliegue de marines y tropas federales en la ciudad.

Corrin Rankin, presidenta del Partido Republicano de California, responsabilizó a los líderes demócratas por los disturbios en Los Ángeles tras las redadas migratorias. Aseguró que las protestas no fueron pacíficas, sino “crimen organizado”, con ataques a policías, destrucción de propiedades y símbolos patrios quemados.
Rankin afirmó que los demócratas han debilitado la ley y alentado el desorden al dar “falsas esperanzas” a inmigrantes con antecedentes. 

El FBI investiga posibles esfuerzos coordinados detrás de los disturbios contra ICE en Los Ángeles, que dejaron decenas de detenidos y daños materiales.
“Estamos investigando a cualquiera que cruce la línea entre una actividad protegida por la Primera Enmienda y la violencia, y estamos preparados para procesar a cualquiera que agreda a un oficial federal o cause daños a la propiedad del Gobierno”, dijo Laura Eimiller, vocera del FBI.
El Departamento de Policía de Los Ángeles. también sigue realizando arrestos por reuniones ilegales, mientras crecen las sospechas sobre la participación de grupos como Antifa. La congresista Anna Paulina Luna planea proponer una ley para designarlos como organización terrorista.

El Departamento de Policía declaró la protesta frente al Centro de Detención Metropolitano en el centro de Los ángeles como una “reunión ilegal”. Algunos participantes fueron vistos cerca de una autopista mientras los oficiales ordenaban su dispersión.
La ciudad mantiene activa una “alerta táctica”, lo que implica que todo el personal uniformado debe permanecer en servicio continuo.

La Policía de San Francisco informó que arrestó a alrededor de 148 personas la noche del domingo, en medio de protestas en apoyo a las manifestaciones contra ICE en el sur de Los Ángeles. De los detenidos, 147 fueron citados y puestos en libertad, incluyendo a seis menores de edad. Aproximadamente la mitad de los arrestados son residentes de San Francisco, según detallaron las autoridades.

Elon Musk pareció dar un giro inesperado al compartir en X una publicación de Trump en la que este criticaba duramente a los líderes demócratas de California por su manejo de las protestas contra redadas migratorias. Aunque Musk no agregó comentarios, el hecho de replicar el mensaje —luego de un reciente enfrentamiento público con el presidente— fue interpretado como un gesto de respaldo en medio del conflicto con el estado.

Tras conocerse la activación de marines en Los Ángeles para proteger instalaciones federales en medio de disturbios, la oficina del gobernador Gavin Newsom aseguró que se trata solo de un traslado entre bases, no de un despliegue operativo. Sin embargo, el Comando Norte confirmó que 700 marines se unirán a la Fuerza de Tarea 51 para reforzar la seguridad federal. A pesar de ese reconocimiento, el equipo de Newsom calificó la medida como “innecesaria y sin precedentes”, acusando al gobierno federal de usar al Ejército “contra sus propios ciudadanos”.

El Departamento de Policía de Los Ángeles declaró una “alerta táctica”, lo que implica que todos los agentes uniformados deberán permanecer en servicio. Esta medida permite al LAPD responder de forma inmediata a posibles disturbios y protestas, extendiendo los turnos de los oficiales y priorizando la atención a situaciones críticas. Las llamadas de menor urgencia podrían quedar en espera hasta que se levante la alerta.

La Administración Trump comenzó el despliegue de 500 marines en Los Ángeles en respuesta al aumento de la violencia durante las protestas. Provenientes de Twentynine Palms, los infantes de marina operarán bajo la Fuerza de Tarea 51, que ya cuenta con 2.100 miembros de la Guardia Nacional. Su misión es proteger propiedad y personal federal, sin involucrarse en tareas policiales. Según el Comando Norte de EEUU, todos los efectivos han sido entrenados en control de multitudes y protocolos de uso de la fuerza.

El fiscal general de California, Rob Bonta, anunció una nueva demanda contra la Administración Trump tras el despliegue de la Guardia Nacional en Los Ángeles este fin de semana. Bonta calificó la orden como ilegal, alegando que se hizo sin el consentimiento del gobernador y violando la Décima Enmienda. El gobernador Gavin Newsom acusó al presidente de usar tácticas de “miedo y control”. Es la demanda número 24 del estado contra la Administración en menos de cinco meses, en una clara señal del conflicto político que persiste entre Sacramento y Washington.

El Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) criticó duramente al gobernador de California Gavin Newsom a raíz de los desmanes producidos por vándalos en Los Ángeles y lo acusó de respaldar a criminales.

"Los políticos de California deben detener a sus turbas alborotadoras", expresó. Y añadió: "Las fuerzas del orden federales están trabajando para proteger y salvaguardar a los ciudadanos estadounidenses de los inmigrantes ilegales criminales".

Además, el DHS le envió un duro mensaje a Newsom. "¿Por qué el gobernador de California se pone del lado de los criminales extranjeros?", preguntó.

Karoline Leavitt, secretaria de Prensa de la Casa Blanca, apuntó contra el gobernador de California Gavin Newsom por los violentos incidentes en Los Ángeles.

"Gavin Newsom no hizo nada mientras estallaban violentos disturbios en Los Ángeles durante días", expresó. "Agentes del orden público federal fueron atacados por radicales violentos y delincuentes ilegales que ondeaban banderas extranjeras porque el gobernador Newsom era demasiado débil para proteger la ciudad", agregó.

La funcionaria concluyó: "El presidente Trump ha intervenido para mantener la ley y el orden y proteger los edificios federales".

El Departamento de Policía de San Francisco declaró durante la madrugada del lunes "asamblea ilegal" en varias zonas de la ciudad después de que varias manifestaciones se tornaran violentas y varios de los participantes atacaran a las fuerzas del orden.
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​Como consecuencia de los enfrentamientos con las fuerzas del orden, al menos 60 personas resultaron detenidas, según el portavoz del cuerpo.

Donald Trump ha declarado la guerra a las máscaras en las manifestaciones. El presidente comenzó su cruzada con una publicación de Truth Social en la que anunciaba la llegada de la Guardia Nacional a Los Ángeles (horas antes de que ésta se produjera, por cierto) y cargaba contra las personas que acudían a las manifestaciones con el rostro oculto: 
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​"A partir de ahora, NO SE PERMITIRÁ el uso de MÁSCARAS en las protestas. ¿Qué tienen que ocultar estas personas y por qué?"

Horas después, volvió sobre el tema, también en Truth: "¡DETENGAN A LAS PERSONAS QUE LLEVAN MÁSCARAS, YA!"

El FBI anunció una recompensa de 50.000 dólares a quienes faciliten información que permita identificar y detener a un individuo por la agresión a un agente federal durante los disturbios de LA. El hombre está acusado de arrojar piedras contra un vehículo de las fuerzas del orden en el bulevar Alondra, dañando a vehículos gubernamentales e hiriendo a un oficial.

El zar de de las fronteras, Tom Homan, recordó que todo el que dificulta la actuación de las fuerzas del orden comete delito. Un comportamiento del que acusó al gobernador californiano, Gavin Newsom, y la alcaldesa de LA, Karen Bass. 

"Lo diré sobre cualquiera. Si se cruza esa línea, es un delito grave albergar y ocultar a sabiendas a un extranjero ilegal. Es un delito grave impedir que las fuerzas del orden hagan su trabajo".

 La respuesta de Newsom, en MSNBC no se hizo esperar: “Ven a por mí, arréstame, acabemos de una vez, tipo duro. Me importa un bledo, pero me preocupo por mi comunidad".

La Policía de Los Ángeles declaró "asamblea ilegal" varios de los puntos más calientes de la ciudad, alertando a quienes se encontraban en estas zonas de que serían detenidos si permanecían allí. Fuentes de las fuerzas de seguridad señalaron que se habían producido al menos 28 arrestos, la mayoría por el bloqueo de autopistas, aunque también señalaron a otros por lanzamiento de cócteles molotov e incluso por cargar con una moto contra los agentes.